
Manuela Viera Gallo nació durante el exilio de sus padres en Roma, Italia. Su perspectiva ha sido profundamente moldeada por la violencia social y política que ha marcado la historia de la mayoría de los países latinoamericanos, así como por un constante estado de migración. Como consecuencia, la obra de Viera Gallo aborda preocupaciones, ansiedades y miedos derivados de su propia experiencia.
Su práctica artística presenta un cuerpo de trabajo multidisciplinar que parte del absurdo para manipular y distorsionar símbolos e imágenes reconocibles, insertándolos en un marco alegórico, fantástico y oscuramente cómico. De esta manera, se apropia de las transformaciones resultantes para analizar distintos procesos de inestabilidad política y social.