Fernell Franco
La práctica de Fernell Franco se desarrolla mayoritariamente en la ciudad de Cali durante la década de los setentas, momento en el que la ciudad vivió un periodo cultural sin precedentes en donde el trabajo de artistas, intelectuales y cineastas confluyó en un interés por registrar los forzados cambios que dieron paso a una modernidad industrializada, sumada a un caótico contexto impulsado por el narcotráfico que se intensificó durante los ochentas y noventas. Trabajos de reconocidos creadores como Andrés Caicedo, Oscar Muñoz, Ever Astudillo y los cineastas Carlos Mayolo y Luis Ospina entre otros insisten en hacer retratos de su ciudad consolidando en muchas ocasiones de manera colaborativa obras que caracterizan una época destacada de la historia del arte colombiano.
Las fotografías de Franco se agrupan en series que surgen de investigaciones visuales en las cuales se ve la práctica deambulante de este fotógrafo que registra las urbes del continente. Prostitutas, Retratos de ciudad, Pacífico, Demoliciones, Color Popular entre otras y presentan sus pioneras técnicas de intervención en el proceso fotográfico, así como la hipótesis del “boceto como obra de arte”, haciendo énfasis además en las formas narrativas implementadas en sus cuatro décadas de carrera.
La presentación de este artista, perteneciente al programa Visionarios, busca hacer justicia a su obra, en un entorno donde solo recientemente la fotografía ha tenido su reconocimiento dentro de las artes visuales. La obra de Franco absolutamente pionera y experimental cruzo los límites entre medios y muy a la par de su colega Oscar Muñoz estuvo interesado por la descomposición de la materia. A parte de reconocimientos muy puntuales, como el de el proyecto Otro documento de Maria Iovino, el trabajo de este artista visual colombiano es bastante desconocido. Sin embargo se destaca como uno de los más innovadores fotógrafos del continente en un momento crucial de la historia de la fotografía, en el cual se trasciende el paradigma de la fotografía como mero documento y el fotógrafo como mero documentalista.
Mientras que la mayoría de sus contemporáneos a lo largo de América Latina seguían trabajando en un marco visual muy tradicional Franco empujo y trascendió los límites de lo fotográfico para consolidar una obra muy singular que lo define sin duda como un autor muy destacado dentro de la historia de la fotografía universal.
Franco’s photographies are done by series that come from his ambulatory reasearch throughout cities of the continent. Prostitutes, Portraits of the city, Pacific, Demolitions, Popular Colour among others show his Pioneer attitude towards photography, as he intervenes the photographic process with chemicals, pencils and sprays, and also confirms the hypothesis of the “proofs as a finished work of art”. He also experiments with visual narrative elements explored throughout his career.
The presentation of this artist among the Visionaries program of the Instituto de Visión wants to give his work its deserved recognition among the art history of Colombia, in an environment where photography has not until recently had its position among visual arts. Franco`s single pieces, (as each photograph has a specific intervention) is a proof of his experimental risks crosing boundaries between médiums in the early seventies in a provincial town in Colombia where isolation and an education in the arts was extremelly tradicional. And in Franco’s case without a formal education and maybe even because of that, he was able to decompose materials, and erase the image in an almost paralel path as his coleague Oscar Muñoz.
Apart from very punctual local recognitions Franco passed away in 2002 without knowing the impact and importance of his work, that is now being acclaimed internationally.